17 de agosto de 2010

La enfermedad y la imagen de un presidente
16 de Agosto de 2010 - Un presidente muchas veces es una fantasía, una imagen creada en la mente de la gente, y generalmente va rodeada de cierta omnipotencia capaz de ser derrumbada fácilmente ante la presencia de una enfermedad. Pero la presencia o ausencia de esa imagen de un gobernante no necesariamente significa capacidad o incapacidad para gobernar.  

Para evaluar los efectos de una enfermedad en la capacidad de un gobernante deben ser considerados los factores relevantes a la misma enfermedad, el tratamiento médico recibido, las características del gobierno y del sistema político vigente en que opera, así como sus características personales capaces de determinar su forma de reaccionar ante la enfermedad.  

Cabe recordar que varios líderes gobernaron mientras estaban enfermos. Basta revisar la historia médica de algunos de ellos en el siglo pasado para encontrar, entre otros, que Churchill por ejemplo padecía de depresión y alcoholismo, Hitler abusaba de meta-anfetaminas y Juan Pablo II gobernaba la Iglesia Católica mientras sufría de la enfermedad de Parkinson. Estos ejemplos son suficientes para darnos cuenta de las diferentes formas en que una enfermedad puede afectar o no la capacidad de gobernar, y cómo en algunos casos han cambiado la historia y en otros produjeron una tragedia. En ese sentido, es importante preguntarse siempre si la enfermedad es o no capaz de afectar la función mental, porque es lo más relevante en las tomas de decisiones en una función política. (segue...) Fonte: ABC.py.

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